Receta de ravioles de pollo caseros fáciles y deliciosos
Deliciosos ravioles de pollo caseros: una opción ideal para tu mesa
En la gastronomía peruana, la diversidad y el sabor son protagonistas indiscutibles. Entre las múltiples preparaciones que podemos encontrar, los ravioles rellenos de pollo se destacan por ser una alternativa exquisita y nutritiva, perfecta para compartir en familia o sorprender a tus invitados con un plato casero, fácil de preparar y que encanta a grandes y chicos. Si buscas una receta práctica, con ingredientes accesibles y un resultado espectacular, has llegado al lugar indicado.
Los ravioles caseros con relleno de pollo ofrecen una combinación perfecta entre la suavidad de la masa y el sabor intenso del pollo sazonado con hierbas y especias. Además, preparar la pasta en casa te permite controlar la calidad de los ingredientes y darle ese toque personal que hace que cada bocado sea inolvidable.
Ingredientes principales para preparar ravioles rellenos de pollo
Antes de sumergirnos en la elaboración, es fundamental contar con todos los ingredientes a la mano para que el proceso sea fluido y disfrutable. A continuación, te mencionamos los productos esenciales que necesitarás para esta preparación tradicional y casera:
- Harina de trigo (preferentemente 0000 para obtener una masa suave)
- Huevos frescos, para darle elasticidad y color a la masa
- Pechuga de pollo, cocida y desmenuzada finamente
- Cebolla roja, picada en cuadritos pequeños
- Ajo, para potenciar el sabor del relleno
- Perejil y albahaca fresca, que aportan aroma y frescura
- Queso fresco, ideal para darle cremosidad al interior
- Sal, pimienta y comino, para sazonar a gusto
- Aceite vegetal o mantequilla para saltear
Elaboración paso a paso de los ravioles caseros rellenos de pollo
Preparar estos ravioles no solo es una experiencia culinaria, sino también una actividad que puede convertirse en un momento de unión familiar. A continuación, te explicamos detalladamente cómo llevar a cabo esta receta tradicional:
1. Preparación de la masa: En un recipiente amplio, coloca la harina tamizada y forma un volcán. En el centro, agrega los huevos y una pizca de sal. Con un tenedor, comienza a integrar los huevos con la harina desde el centro hacia afuera, hasta que la mezcla empiece a tomar forma. Luego, amasa con las manos durante aproximadamente 10 minutos, hasta obtener una masa lisa y elástica. Si la masa está muy seca, añade unas gotas de agua; si está pegajosa, espolvorea un poco más de harina.
Una vez lista, envuelve la masa en papel film y déjala reposar en el refrigerador por al menos 30 minutos. Este paso es crucial para que la masa gane firmeza y sea más manejable al momento de estirarla.
2. Preparación del relleno: Mientras la masa reposa, puedes comenzar a preparar el relleno. En una sartén con un poco de aceite, sofríe la cebolla picada hasta que esté transparente. Añade el ajo picado y deja que su aroma se libere, cuidando que no se queme. Incorpora la pechuga de pollo previamente cocida y desmenuzada, mezcla bien y sazona con sal, pimienta y una pizca de comino, especia muy apreciada en la cocina peruana por su sabor distintivo.
Deja que el relleno se cocine unos minutos para que los sabores se integren. Finalmente, retira del fuego y añade el perejil y la albahaca picados finamente, junto con el queso fresco desmenuzado. Mezcla suavemente para que el relleno quede homogéneo y con una textura cremosa.
3. Armado de los ravioles: Retira la masa del refrigerador y, sobre una superficie limpia y ligeramente enharinada, comienza a estirarla con un rodillo hasta obtener una lámina fina, pero sin que se rompa. Divide la masa en tiras largas y anchas.
Coloca pequeñas porciones del relleno, aproximadamente una cucharadita, en intervalos regulares sobre una de las tiras de masa. Humedece ligeramente los bordes alrededor del relleno con agua para facilitar el sellado. Luego, cubre con otra tira de masa y presiona alrededor de cada porción para eliminar el aire y sellar bien los bordes.
Con un cortador de pasta o un cuchillo afilado, corta los ravioles individualmente. Puedes darles la forma que prefieras: cuadrados, rectangulares o redondos. Para asegurarte de que no se abran al cocinarse, presiona bien los bordes con un tenedor.
Cocción y presentación final
Para cocinar los ravioles, hierve abundante agua con sal en una olla grande. Cuando el agua esté en ebullición, añade los ravioles con cuidado para que no se peguen entre sí. Cocínalos durante 3 a 5 minutos o hasta que floten en la superficie, señal de que están listos.
Una vez cocidos, retíralos con una espumadera y colócalos en un plato. Puedes acompañarlos con una salsa de tomate casera, un pesto de albahaca o una salsa bechamel ligera, según tu preferencia. Espolvorea queso parmesano rallado y decora con hojas frescas de albahaca para darle un toque especial.
Beneficios y consejos para preparar pasta rellena en casa
Optar por preparar pasta rellena artesanal como estos ravioles con pollo trae múltiples ventajas. En primer lugar, controlas la calidad de cada ingrediente, evitando conservantes y aditivos que suelen tener los productos industriales. Además, puedes adaptar el relleno a los gustos y necesidades de tu familia, incorporando ingredientes frescos y nutritivos.
Otro aspecto importante es que hacer pasta casera desarrolla habilidades culinarias, fomenta la creatividad y puede ser una actividad divertida para compartir con niños y adultos. Además, al cocinar tú mismo, puedes ajustar la cantidad de sal, grasas y especias, haciendo que el plato sea más saludable.
Para que tu experiencia sea aún mejor, te recomendamos algunos consejos prácticos:
- Utiliza harina de buena calidad para obtener una masa más elástica y fácil de manejar.
- Deja reposar la masa el tiempo suficiente para que gane consistencia.
- No abuses del relleno para evitar que los ravioles se abran al cocinarse.
- Si no tienes un cortador especial, un cuchillo bien afilado puede ser tu mejor aliado.
- Sirve los ravioles recién cocidos para disfrutar de su textura y sabor óptimos.
Variaciones y sugerencias para innovar en la cocina
Si bien la receta tradicional con pollo es deliciosa, puedes experimentar con diferentes rellenos y combinaciones para darle un giro único a tu plato. Por ejemplo, una mezcla de pollo con espinaca y queso ricotta crea un balance perfecto entre frescura y cremosidad.
También puedes añadir especias peruanas como el ají amarillo o el huacatay para aportar un toque autóctono y diferente. Para la masa, si quieres probar algo distinto, puedes agregar un poco de puré de zapallo o camote, que le dará color y un sabor dulce sutil.
En cuanto a las salsas, más allá de las clásicas, una salsa de rocoto suave o una salsa de queso andino pueden complementar maravillosamente el relleno, ofreciendo una experiencia gastronómica auténtica y sorprendente.
¿Por qué elegir ravioles caseros en tu cocina diaria?
Preparar pasta rellena en casa no solo es una manera de disfrutar de platos ricos y saludables, sino también de conectar con nuestras raíces y tradiciones culinarias. En Perú, donde la fusión de culturas ha enriquecido nuestra gastronomía, recetas como estas representan una forma de preservar y reinventar sabores.
Además, hacer ravioles en casa puede ser una solución práctica para quienes buscan opciones nutritivas y económicas. El pollo es una fuente excelente de proteínas, y al combinarlo con masa fresca y verduras, obtienes un plato completo que satisface a toda la familia.
Finalmente, esta preparación te permite ajustar las porciones según tus necesidades, evitar desperdicios y disfrutar de una comida hecha con amor y dedicación, algo que siempre se nota en el sabor.
Herramientas útiles para facilitar la preparación de pasta casera
Si bien la receta puede realizarse con utensilios básicos, contar con algunas herramientas puede hacer el proceso más sencillo y rápido:
- Rodillo de amasar: para estirar la masa de manera uniforme.
- Cortador de ravioles o moldes especiales: que permiten dar formas perfectas y uniformes.
- Espátula o cuchillo afilado: para separar los ravioles sin dañar la masa.
- Olla grande con tapa: para cocinar los ravioles sin que se peguen.
- Espumadera: para retirar la pasta del agua caliente sin romperla.
Estas herramientas, aunque no imprescindibles, facilitan la elaboración y te permiten lograr resultados más profesionales, especialmente si planeas hacer ravioles con frecuencia.
Un platillo que une tradición y sabor peruano
Los ravioles caseros rellenos de pollo son un ejemplo claro de cómo la cocina peruana puede incorporar técnicas y sabores internacionales, adaptándolos a nuestro paladar y cultura. Esta preparación no solo es un deleite para el gusto, sino también un reflejo de la riqueza gastronómica que caracteriza a nuestro país.
Invitamos a todos los amantes de la cocina a probar esta receta, experimentar con sus variaciones y disfrutar de un plato que, sin duda, se convertirá en uno de los favoritos en cualquier hogar peruano.

