Receta de trufas de sangrecita fáciles y deliciosas para preparar en casa
Disfruta de unas trufas de sangrecita caseras, fáciles y llenas de sabor
En el maravilloso mundo de la gastronomía peruana, existen platillos y bocaditos que destacan por su sabor auténtico y su preparación tradicional. Una de estas delicias son las trufas de sangrecita, una opción perfecta para quienes buscan un aperitivo o snack nutritivo, con un toque especial que combina ingredientes locales y técnicas caseras. Si te preguntas cómo preparar esta exquisitez en casa, aquí te contamos todo lo que necesitas saber para lograr un resultado espectacular.
Las trufas de sangrecita, conocidas también como bolitas o croquetas de sangre, son una preparación que aprovecha la sangrecita fresca, muy utilizada en la cocina peruana para dar sabor y textura a diversos platos. Su elaboración es sencilla, pero requiere atención a los detalles para que queden jugosas y con un sabor equilibrado. Además, esta receta se adapta muy bien a distintos gustos, pues puedes modificar algunos ingredientes para darle un toque personal.
¿Qué ingredientes necesitas para preparar trufas de sangrecita caseras?
Antes de entrar en el proceso, es importante tener a la mano todos los ingredientes frescos y de buena calidad. Aquí te dejamos una lista con los elementos básicos para esta preparación:
- Sangrecita fresca (aproximadamente 500 gramos)
- Cebolla roja finamente picada
- Ajo molido o picado finamente
- Hierbas aromáticas como perejil o cilantro picado
- Sal y pimienta al gusto
- Harina de trigo o pan rallado para dar consistencia
- Huevos para ligar la mezcla
- Aceite vegetal para freír
- Ají amarillo molido (opcional para un toque picante)
Pasos detallados para preparar trufas de sangrecita en casa
La clave para unas trufas perfectas está en la correcta manipulación de la sangrecita y en el equilibrio de sabores que logres durante la preparación. Sigue estos pasos para obtener un resultado delicioso:
1. Limpieza y preparación de la sangrecita: Lo primero es lavar muy bien la sangrecita bajo agua fría para eliminar cualquier impureza o exceso de sangre. Luego, se recomienda escaldarla en agua hirviendo con sal por unos minutos, esto ayudará a eliminar el sabor fuerte y facilitará su manipulación.
2. Sofrito base: En una sartén con un poco de aceite, sofríe la cebolla roja y el ajo hasta que estén transparentes y fragantes. Si te gusta el picante, agrega un poco de ají amarillo molido para dar ese toque tradicional peruano.
3. Mezclado de ingredientes: Una vez que la sangrecita esté escaldada y fría, pícalas finamente o procésalas ligeramente para obtener una textura homogénea pero no demasiado líquida. Combina la sangrecita con el sofrito, las hierbas aromáticas, sal, pimienta y un huevo para ligar la mezcla. Si la mezcla está muy húmeda, añade poco a poco harina o pan rallado hasta obtener una masa moldeable.
4. Formado de las trufas: Con las manos limpias, forma pequeñas bolitas del tamaño de una nuez. Procura que queden bien compactas para que no se desarmen al freírlas.
5. Cocción: Calienta suficiente aceite en una sartén profunda y fríe las trufas a fuego medio hasta que estén doradas por fuera y cocidas por dentro, aproximadamente 4 a 5 minutos. Retíralas y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
Siguiendo estos pasos, tendrás unas trufas con una textura suave por dentro y una capa crocante por fuera, ideales para acompañar con una salsa criolla o un ají de tu preferencia.
Variantes para darle un giro a tu preparación
Una de las ventajas de esta preparación es que puedes adaptarla según tus gustos o ingredientes disponibles. Algunas ideas para personalizar tu receta son:
- Incorporar queso fresco rallado para un toque cremoso.
- Agregar choclo molido para darle un sabor más dulce y una textura diferente.
- Usar harina de yuca o de maíz en lugar de trigo para opciones sin gluten.
- Mezclar con especias como comino o ají panca para potenciar los sabores tradicionales.
- Acompañar con salsas caseras como huancaína o ocopa para realzar el sabor.
Consejos para preparar trufas de sangrecita perfectas en casa
Para que tu experiencia culinaria sea exitosa y las trufas queden en su punto, te recomendamos tener en cuenta algunos tips muy útiles:
Selecciona sangrecita fresca y de calidad: Es fundamental que la sangrecita provenga de una fuente confiable para garantizar sabor y seguridad.
No te saltes el escaldado: Este paso reduce el sabor fuerte y mejora la textura final.
Controla la consistencia de la masa: La mezcla debe ser lo suficientemente firme para formar bolitas, pero no demasiado seca para que no queden duras.
Fríe a temperatura media: Si el aceite está muy caliente, las trufas se queman por fuera y quedan crudas por dentro; si está muy frío, absorberán mucho aceite.
Prueba diferentes acompañamientos: Un buen ají, una salsa fresca o una ensalada criolla complementan perfectamente estas delicias.
Beneficios y tradición detrás de este platillo peruano
Las trufas elaboradas con sangrecita no solo son un bocadito delicioso, sino que también forman parte de la cultura gastronómica peruana, especialmente en zonas donde se aprovechan todos los ingredientes para minimizar desperdicios y crear platos nutritivos.
La sangrecita es rica en hierro y proteínas, lo que convierte a estas trufas en una opción energética y saludable cuando se preparan de forma casera y con ingredientes naturales. Además, su sabor y textura evocan las tradiciones culinarias de las familias peruanas que han transmitido estas recetas de generación en generación.
Ideas para servir y disfrutar tus trufas caseras
Una vez que tengas listas tus trufas, puedes presentarlas de muchas maneras que harán que tus invitados queden encantados. Algunas sugerencias incluyen:
- Servirlas como aperitivo acompañado de una salsa de ají verde o huancaína.
- Acompañarlas con una ensalada fresca de tomate, cebolla y cilantro para equilibrar sabores.
- Ofrecerlas como parte de una tabla de anticuchos y otros bocaditos típicos.
- Incluirlas en un almuerzo familiar junto con arroz blanco y papas sancochadas.
En definitiva, estas trufas son un recurso versátil que se adapta a múltiples ocasiones y combinaciones, convirtiéndose en un plato favorito para quienes disfrutan de la cocina tradicional peruana.
Preparación y conservación para tener trufas listas siempre
Si quieres preparar una mayor cantidad para tener siempre a mano, puedes congelar las trufas formadas pero crudas, separadas por papel manteca para que no se peguen. Cuando desees consumirlas, solo tienes que freírlas directamente desde congeladas, aumentando un poco el tiempo de cocción.
Otra opción es cocinar todas las trufas y conservarlas en un recipiente hermético en el refrigerador por un par de días. Solo debes calentarlas antes de servir para que recuperen su textura crocante.
En resumen, preparar trufas de sangrecita en casa es una experiencia culinaria que une tradición, sabor y practicidad
Con ingredientes accesibles y pasos claros, puedes disfrutar de un bocadito peruano lleno de historia y sabor. Además, al hacerlo en casa, tienes el control sobre la calidad y los sabores, pudiendo adaptar la receta a tus preferencias y necesidades.
No esperes más para sorprender a tu familia y amigos con esta deliciosa preparación que, sin duda, se convertirá en un clásico dentro de tus recetas favoritas.

