Receta de Nutella casera fácil y rápida para preparar en casa
Deliciosa preparación casera: cómo hacer Nutella en casa fácil y rápido
Si eres amante de los sabores dulces y buscas una alternativa casera para disfrutar de esa crema de avellanas que tanto te gusta, estás en el lugar correcto. Preparar una crema de avellanas con chocolate en casa es más sencillo de lo que imaginas y, además, podrás controlar los ingredientes para que sea más saludable y natural. En este artículo, te enseñaremos paso a paso cómo elaborar una pasta dulce para untar que se asemeja mucho a la Nutella tradicional, pero con un toque casero y auténtico.
¿Qué necesitas para preparar esta deliciosa crema de avellanas?
Para comenzar con esta preparación, es fundamental contar con ingredientes frescos y de calidad. La base principal son las avellanas, que aportan ese sabor característico y la textura cremosa. Además, utilizaremos cacao en polvo, azúcar, aceite vegetal y un poco de leche para conseguir la consistencia ideal.
Antes de entrar en detalles, aquí te dejamos los ingredientes que necesitarás para esta mezcla dulce para untar casera:
- 200 gramos de avellanas tostadas
- 100 gramos de azúcar (puedes ajustar al gusto o usar azúcar rubia)
- 2 cucharadas de cacao en polvo sin azúcar
- 100 ml de leche evaporada o leche fresca
- 2 cucharadas de aceite vegetal (puede ser de girasol o de oliva suave)
- 1 cucharadita de esencia de vainilla para darle un aroma especial
- Una pizca de sal para realzar los sabores
Pasos detallados para elaborar tu propia crema de avellanas con chocolate
El proceso para obtener esta exquisita pasta dulce para untar es bastante sencillo, pero requiere un poco de paciencia y amor por la cocina. A continuación, te explicamos paso a paso cómo hacerlo para que logres un resultado suave, cremoso y con un sabor espectacular.
1. Tostar las avellanas: Aunque puedes comprar avellanas ya tostadas, tostar las tuyas en casa garantiza un sabor más fresco y aromático. Para ello, precalienta el horno a 180 °C. Coloca las avellanas en una bandeja y hornea durante aproximadamente 10-12 minutos, moviéndolas a la mitad del tiempo para que se tuesten uniformemente. Cuando estén listas, déjalas enfriar un poco.
2. Retirar la piel de las avellanas: Este paso es importante para evitar que la textura final tenga pequeños trozos amargos. Para quitar la piel, frota las avellanas tostadas con un paño limpio o entre tus manos. No es necesario eliminar toda la piel, solo la mayor parte para obtener una crema más suave.
3. Procesar las avellanas: Coloca las avellanas en un procesador de alimentos o licuadora potente. Tritúralas hasta que empiecen a soltar su aceite natural y formen una pasta. Este paso puede tomar varios minutos, así que ten paciencia y detén el procesador de vez en cuando para evitar que se sobrecaliente.
4. Añadir el cacao y el azúcar: Cuando la pasta de avellanas esté lista, incorpora el cacao en polvo y el azúcar. Mezcla bien para que todos los ingredientes se integren de manera homogénea. Aquí puedes ajustar la cantidad de azúcar según tu preferencia, si te gusta más dulce o menos.
5. Incorporar la leche y el aceite: Poco a poco, añade la leche evaporada y el aceite vegetal mientras continúas procesando la mezcla. Esto ayudará a que la crema quede más suave y untuosa, similar a la textura comercial. Si notas que la mezcla está muy espesa, puedes agregar un poco más de leche o aceite para lograr la consistencia deseada.
6. Agregar la esencia de vainilla y la sal: Finalmente, añade la esencia de vainilla y una pizca de sal. Estos ingredientes realzan el sabor y hacen que la crema tenga un aroma irresistible. Mezcla nuevamente para incorporar todo de manera uniforme.
Una vez que hayas terminado, prueba la crema y ajusta el dulzor o la textura si lo consideras necesario. Si quieres que quede más líquida, añade un poco más de leche o aceite. Si prefieres una crema más espesa, procesa un poco más las avellanas o reduce los líquidos.
¿Cómo conservar esta deliciosa crema casera?
Al tratarse de una preparación casera, es importante almacenarla adecuadamente para mantener su frescura y sabor. La mejor manera de conservarla es en un frasco de vidrio con tapa hermética, guardado en el refrigerador. De esta forma, podrás disfrutarla durante aproximadamente 2 semanas.
Si quieres que la crema esté a temperatura ambiente para untarla fácilmente, solo sácala del refrigerador unos 10 minutos antes de usarla. Evita dejarla expuesta por mucho tiempo para prevenir que se estropee o pierda calidad.
Ventajas de preparar esta pasta dulce en casa
Además de ser una opción económica, hacer esta crema de avellanas con chocolate en casa tiene múltiples beneficios que la convierten en una alternativa atractiva frente a las opciones comerciales:
- Control total sobre los ingredientes: Puedes elegir productos naturales, sin conservantes ni aditivos artificiales.
- Personalización del sabor: Ajusta el dulzor, la intensidad del cacao o la textura según tus preferencias.
- Ideal para personas con alergias o intolerancias: Al preparar la crema tú mismo, evitas ingredientes que puedan causar reacciones adversas.
- Frescura garantizada: Nada se compara con el sabor de una preparación recién hecha.
- Actividad divertida y creativa: Cocinar esta mezcla dulce puede ser una excelente actividad para hacer en familia o con amigos.
Ideas para disfrutar esta crema dulce en tu día a día
Una vez que tengas lista esta deliciosa pasta para untar, las opciones para disfrutarla son infinitas. Aquí te compartimos algunas sugerencias para que aproveches al máximo su sabor y versatilidad:
1. En pan tostado: La forma más clásica de disfrutar esta crema es untándola en pan tostado o pan francés. Puedes acompañarla con rodajas de plátano o fresas para un desayuno completo y delicioso.
2. Relleno para postres: Usa esta crema casera para rellenar tortas, cupcakes o crepes. Su textura suave y sabor intenso le dará un toque especial a tus preparaciones.
3. Dip para frutas: Sirve la crema en un bol pequeño como dip para frutas frescas como manzana, pera, o fresas. Es una merienda saludable y sabrosa.
4. Ingrediente para batidos: Añade una cucharada a tus batidos de frutas o leche para darles un sabor único y cremoso.
5. Complemento en desayunos peruanos: Aunque tradicionalmente los desayunos peruanos incluyen panes con mantequilla o mermelada, esta crema dulce puede ser un toque innovador para acompañar panetón, cachangas o incluso humitas dulces.
Variaciones para preparar una crema dulce diferente
Si quieres experimentar y darle un giro a esta preparación básica, puedes probar algunas de estas variaciones para crear nuevas versiones de tu crema casera:
- Crema con leche condensada: Sustituye la leche evaporada por leche condensada para un sabor más dulce y una textura más densa.
- Con chocolate amargo: Agrega trozos de chocolate oscuro derretido para intensificar el sabor a cacao.
- Versión con maní: Mezcla avellanas y maní tostado para un sabor más robusto y diferente.
- Endulzada con miel: En lugar de azúcar, utiliza miel para un toque más natural y un sabor especial.
- Con leche de almendras o coco: Para una opción vegana o sin lactosa, reemplaza la leche tradicional por leche vegetal.
Consejos para obtener la mejor textura y sabor en tu crema casera
Para que tu preparación quede perfecta, aquí te dejamos algunos tips que te ayudarán a mejorar la textura y sabor de tu pasta dulce:
1. Utiliza avellanas frescas y de buena calidad: Esto marca una gran diferencia en el sabor final.
2. No escatimes en el tiempo de procesado: Deja que las avellanas suelten bien su aceite natural para lograr una textura cremosa y suave.
3. Ajusta los ingredientes a tu gusto: Si prefieres menos dulce, reduce el azúcar o prueba endulzantes naturales.
4. Guarda la crema en frascos limpios y esterilizados: Así evitarás que se contamine y se conserve por más tiempo.
5. Si tienes un procesador de alimentos potente, el resultado será más fino: En caso contrario, puedes pasar la mezcla por un colador para eliminar grumos.
Un dulce toque peruano para tu crema de avellanas
Si quieres darle un giro peruano a esta preparación, puedes incorporar ingredientes típicos de nuestra gastronomía. Por ejemplo, añadir un poco de canela en polvo o clavo de olor le dará un aroma muy especial que recuerda a las infusiones tradicionales. También puedes usar miel de quinua o aguaymanto para endulzar de manera natural y con un toque local.
Esta crema dulce para untar puede ser la estrella en tus reuniones familiares o una excelente opción para preparar desayunos nutritivos y llenos de sabor. Además, al hacerla en casa, podrás compartir con tus seres queridos una preparación hecha con cariño y dedicación.
¿Por qué elegir una opción casera en lugar de la comercial?
Las cremas comerciales, aunque prácticas, suelen contener ingredientes procesados, conservantes y altos niveles de azúcar refinada que no siempre son beneficiosos para la salud. Al optar por una versión casera, tienes la posibilidad de usar productos orgánicos, controlar la cantidad de azúcar y evitar aditivos innecesarios.
Además, esta preparación te permite explorar tu creatividad en la cocina, experimentar con diferentes sabores y adaptar la receta a tus necesidades nutricionales. Por ejemplo, si buscas una opción baja en azúcar o sin gluten, puedes modificar fácilmente la receta básica para que se ajuste a tus requerimientos.
Un regalo perfecto para tus amigos y familiares
Preparar esta crema dulce casera también puede ser una idea original para regalar en fechas especiales. Puedes envasarla en frascos decorados con cintas y etiquetas personalizadas, y sorprender a tus seres queridos con un detalle hecho por ti mismo. Es un obsequio que transmite cariño y dedicación, además de ser delicioso.
En resumen, esta preparación es una excelente manera de disfrutar de un dulce tradicional con un toque casero, saludable y lleno de sabor. No dudes en probarla y compartirla con quienes más quieres.